Zonnewijzerspad 1-2


Senda del reloj de sol 1-2

La «Haremakery», aquí se fabricaban «pelos»; esteras de prensa hechas de crin de caballo para su uso en molinos de aceite.

A lo largo del Zonnewijzerspad, en Zaanse Schans, hay tanto casitas de obreros como casas de comerciantes. Estos típicos edificios zaaníes suelen tener una sola planta y a menudo están pintados de verde y blanco. Las casas son similares, pero las de los mercaderes son más grandes y están más ricamente decoradas.

El Sendero del Reloj Solar 1-2 es la Haremakery. La casa tiene el año 1743 en la fachada, mientras que el taller de la parte inferior data de 1673. La fábrica de cacao «De Zaan» donó esta propiedad a la Fundación Zaanse Schans cuando tuvo que dejar paso a la ampliación de la fábrica.

Historia

La casa tiene una rica historia, en la que varias generaciones fabricaron «pelos»: esteras de crin de caballo trenzadas en doble pliegue con una funda de cuero, que se utilizaban en los molinos de aceite como filtros al prensar semillas de lino y cacahuetes. La profesión de «haremaker» se convirtió incluso en el apellido de la familia, como puede verse en el letrero de la fachada con el nombre «Klaas Haremaker en Comp.». El oficio acabó desapareciendo con la llegada de las prensas hidráulicas, que sustituyeron a los molinos de aceite y las prensas de percusión, pero aún puedes ver cómo se utilizaban estos pelos en los molinos de aceite «De Zoeker» y «De Bonte Hen» en Zaanse Schans.
La propiedad tiene unos distintivos herrajes ornamentales en la puerta principal, lo que indica que su ocupante era rico en aquella época.

 

El «Haremakerij» en Hoogstraat 39-41 en Koog aan de Zaan hacia 1930

Transporte en 1964 de la propiedad de Hoogstraat 41 a través del puente hasta Zonnewijzerspad 2

Senda del reloj de sol 1-2

Monumento nacional 1673 y 1743
Reincorporación 1964
(antes High Street 39-41,
Koog aan de Zaan)

  • Casa residencial

  • Zonnewijzerspad 1-2
  • No visites

    Las casas del Zaanse Schans muestran la auténtica e histórica construcción en madera del Zaanse. Las casas están ocupadas, por lo que no puedes visitarlas. Obsérvalos desde lejos y, por favor, sé considerado con los residentes.
    ¡Disfruta del entorno y de un día maravilloso en Zaanse Schans!