Galletas y chocolate Verkade… ¡tradicionalmente un nombre familiar!

Pan, bizcocho, galletas y chocolate… la región de Zaan también es conocida por su industria alimentaria. En una sección separada del Museo del Zaan, este mundo revive en el Pabellón Verkade, inaugurado por la reina Beatriz en 2009. La rica historia de la empresa Zaan comenzó en 1886.

La colección corporativa de la empresa Verkade cuenta su especial historia a través de los numerosos anuncios originales, como carteles, envases y latas. Además de una enorme colección de fotos, también se pueden admirar tres líneas de producción en funcionamiento de chocolate, galletas y velas de té. Allí donde trabajaban las legendarias «Chicas de Verkade», los niños pueden ahora envolver una tableta de chocolate con un envoltorio diseñado por ellos mismos. Y también pueden divertirse con juegos interactivos y educativos… uno se imagina en una fábrica de principios del siglo XX, donde las auténticas máquinas siguen en pleno funcionamiento y la historia del chocolate y las galletas cobra vida.

En el Tesoro Verkade puedes ver la mejor y más antigua campaña de marketing iniciada hace más de 100 años: aquí se pueden ver los «álbumes Verkade» con las famosas imágenes Verkade, así como las acuarelas originales realizadas para ellos. Jac. P. Thijsse y Jan Voerman jr. son nombres conocidos como escritores e ilustradores; pero otros escritores y pintores holandeses, como Henricus Rol, también contribuyeron a los álbumes Verkade. En total, Verkade publicó 35 álbumes ilustrados, entre 1903 y 1940, y entre 1965 y 1995. El educador y escritor Jac. P. Thijsse es considerado hoy el patriarca de la conservación de la naturaleza en Holanda; en 1905 fundó la fundación Natuurmonumenten. A lo largo de los años, se han vendido en Holanda dos millones de álbumes Verkade.

Verkade también se hizo famosa por sus velas de té. La producción de té y luces nocturnas comenzó en una pequeña fábrica de Ámsterdam en 1898 y la fábrica de ceras de Zaandam abrió en 1902. La «waxina» es una mezcla de cera y parafina, un invento del yerno inglés de E.G. Verkade, que le arrebató la patente. Al principio, el producto no se vendió muy bien, pero cuando Verkade recibió un pedido de decenas de miles de luces para las celebraciones de la coronación del rey de Inglaterra, las luces eran imparables. Más tarde, todo el mundo tenía luces Verkade en sus casas e incluso los canales de Ámsterdam se iluminaban regularmente con ellas. Desde hace más de un siglo, «Waxine» es una marca muy conocida, acuñada en su día por Anton Verkade.